DICE QUE SOY PROVOCADORA

La excusa para hacer lo que hizo es que soy provocadora. Pues vaya por Dios. Es la excusa de todos los maltratadores, incluso de los violadores.
La violenciaque ejerce este señor es una forma de ejercer el poder. Cuando no puede por convencimiento (ya creo que no concence a nadie) lo pretende hacer a través de la fuerza física o psicológica. Esta pretensión implica la existencia de una persona que quiere aformar su posición superior respecto a otra. La violencia de género la sufrimos muchas mujeres simplemente por el hecho de serlo. Es una cuestión de dominación masculina en la que el hombre, considerando inferior a la mujer intenta dominarla para así dejar claro que es superior a ella.Mesas y armarios de juzgados están llenos de expedientes donde aparece este tipo de comportamiento violento.
El hombre, por miedo a perder el poder de autoridad y económico, y viendo amenazada su supuesta superioridad sobre la mujer, se comporta de forma más violenta. Los maltratadores suelen ser hombres que creen en el estereotipo masculino, creen que por ser hombres tienen el poder y desean mantenerlo, usando para ello la violencia física y psicológica, si la liberación de una mujer, como mujer y como profesional se convierte en amenaza. Si el agresor se hace consciente de la pérdida de sus privilegios y pudiendo perder el control que pretende ejercer, da un salto en ese dominio y aparece la agresión.

Las formas de violencia contra la mujer son variadas. Puede ser a través de la violencia física: empujones, golpes, ... que producen daño físico, miedo y malestar en la víctima, o mediante la violencia psicológica o abuso emocional: actos de degradación, humillación, chantaje emocional, insultos, hacerla sentir loca, culpabilización, control de sus actividades, etc. Atenta contra las defensas psicológicas de la mujer, contra su autoestima y percepción, conlleva graves consecuencias ya que bloquea los recursos de la mujer. El agresor, con estas agresiones, intenta que la mujer cumpla con las funciones impuestas por su rol de género.


¿Cuál es el problema? Que la mujer que tienen enfrente se les escapa a estos energúmenos. Y entonces la violencia campoa por sus respetos. sin darse cuenta que, al final, su comportamiento es claro y diáfano: machistas y maltratadores, que pretenden intimidar con sus acciones. Y en realidad, no sólo no intimidan, sino que, si acaso, dan pena, risa, y, como no, vergüenza ajena.