¿Y cómo llegó la papa a Canarias?
En palabras del ilustre realejero Don José de Viera y Clavijo “... las primeras papas las trajo del Perú don Juan Bautista de Castro por el año 1622. Este señor las hizo sembrar en sus tierras de Icod el Alto desde donde tan felizmente se han difundido por todas las Canarias.”
Ahora, gracias a la visión de futuro de un grupo de vecinos agricultores se formó “La Papa Bonita”, la asociación de cosecheros de papa bonita y cultivos tradicionales de Icod el Alto.
Sus objetivos principales son:
Promoción y recuperación de la papa bonita y los cultivos tradicionales.
Favorecer el desarrollo y la mejora, la producción integrada en el cultivo.
Protección del medio ambiente.
Desarrollo rural.
Defensa del sector.
Los cosecheros que integran la asociación utilizan métodos para conseguir una producción integrada a caballo entre lo tradicional y lo ecológico. La rotación de cultivo es una práctica necesaria que muy pocos agricultores llevan a cabo. Como Emérito García y Anatolio Luis bien nos explican: “la necesidad y el desconocimiento hacen que haya gente que cultive ‘papas sobre papas’ y agote el terreno año tras año. Mediante técnicas de rotación la tierra se oxigena y mineraliza: este proceso consiste en alternar plantas de diferentes familias y con necesidades nutritivas distintas en un mismo lugar durante distintos ciclos. De este modo se evita que las enfermedades o los hongos se afiancen.” Un año se siembran papas, después manchón (avena, cebada y trigo) o leguminosas (judías pintas, habas, altramuces). Otro método es el del barbecho, que consiste en dejar una parcela sin cultivar, arándola para dar vuelta la tierra y que las mismas hierbas sirvan de abono.
Para gustos...
En la asociación cada cosechero tiene su papa favorita, aunque la “Bonita negra” y la “Ojo de perdiz” se llevan el triunfo por mayoría. Hace poco tiempo se realizó una “cata a ciegas de papas bonitas” a la que asistieron cocineros invitados de distintos puntos del mundo. Las papas se presentaron hervidas sin sal ni aditivos que pudieran afectar su sabor. Ganó la papa bonita blanca. La experiencia fue tan interesante que la asociación se decidió por apostar en la realización de actividades y talleres para que la gente se entere de su labor y disfrute de una cita con la gastronomía.
Cosas para recordar
Durante la visita que realizamos a las huertas ubicadas en medianías de Icod el Alto surgieron muchos recuerdos entre los agricultores. La mayoría de ellos vivieron los tiempos en que toda la familia pasaba a veces semanas sin volver a bajar de la montaña. Allí, mientras cultivaban o cosechaban, era común que prepararan las Papas Turradas. En esta receta se hace el fuego en un hoyo poco profundo directamente en la tierra (más bien, en la zahorra, la tierra blanca de piedra pómez tan típica del Teide), se apartan las brasas con cuidado y se colocan las papas para volver a taparlas con más tierra y brasas. La mayoría de ellos se acuerda cuando la abuela repartía las tareas de buscar leña o repartir el vino a los campesinos... y cuando bajaban la cosecha al poblado en bestias, por caminos casi imposibles. ¡Cuántas bodas y fiestas familiares se han festejado llenando las mesas de papas en abundancia!
Hoy el paseo por esas alturas es precioso. Prolijas parcelas cultivadas, según el mes de color lila por la flor de la papa o dorado de espigas de centeno y trigo. El sol permanece siempre vivo y brillante, aunque más abajo en el pueblo haya neblina o llovizne.
Son tiempos difíciles para la agricultura y el esfuerzo es mucho. Sin embargo, como nos comentan Jose y Elías “hay una satisfacción especial que te da trabajar la tierra. Intentamos que los más jóvenes también lo entiendan. Así no se perderá la tradición y este producto tan nuestro.”
Para contactar con la asociación”La Papa Bonita”
(Asociación de cosecheros de papa bonita y cultivos tradicionales de Icod el Alto)
lo puede hacer escribiendo a papabonita@gmail.com o llamando al 620 933568 - 616 456884 - 679 272770
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