martes, 2 de diciembre de 2008

¡QUÉ VERGÜENZA LA SIMILITUD!

Lo dijo González Jerez hoy de Valencia. Como ven, sustituimos el nombre del alcalde de La Orotava por el de nuestro municipio y queda perfectamente reflejado. Lo que pasa es que nuestro municipio es más pequeño y menos relevante. inculso dentro de CC.

¡Qué vergüenza ajena!

Los biólogos celulares podrán averiguar un día si Valencia Manolo Reyes es un nacionalista canario, pero no es demasiado prematuro señalar que el alcalde bebe retóricamente en una vieja tradición xenófoba española, en la que se entrecruzan el miedo y el odio al moro, y que cualquiera puede documentar en Julio Caro Baroja, en Américo Castro o en Juan Goytisolo. El moro, como el judío, es el Otro, y desde el Medievo se construyó literariamente una imagen arquetípica del musulmán como cifra de maldades y setina de vicios. Es irrelevante que la inmensa mayoría de los inmigrantes que llegan en patera a Canarias sean de origen subsahariano y no magrebí, y lo es, sobre todo, para el propio Valencia Manuel Reyes, al que la realidad le importa un bledo. Lo que pretende es excitar la intranquilidad y la irritación de su clientela electoral, y si es posible, congraciarse con algún editor de periódicos, quien después de años de fructíferas relaciones mutuas lo ha condenado al ostracismo por su excesiva tibieza. Lo suyo no es una anécdota, sino un escandaloso acto de irresponsabilidad en una sociedad que no necesita ni del miedo ni del desprecio para enfrentarse a una realidad multicultural y a un problema cuyas verdaderas víctimas son los inmigrantes, no los canarios, y menos aun, los alcaldes zafios, lenguaraces y populacheros.

1 comentario:

Anónimo dijo...

¡Qué pena que San Juan de la Rambla haya pasado tan desapercibido durante tantos años!Lo peor es que pretenden seguir pasando desapercibidos pero seguir medrando a costa de no hacer nada. Luego habrá que ponerle la culpa a algún chivo expiatorio que de alguna manera es quien está dando la cara contínuamente por este pueblo.Lo fácil es culpabilizar siempre al otro. La mejor defensa es el ataque. Así es lo único que hacen con usted Doña Fidela. ¿Pero por qué no reconocen ya que se les está escapando de las manos este siglo XXI y que deben dar la alternativa humildemente a la gente nueva?. Aferrados al poder y al dinero de todos como auténticas lapas.Cuando podrían pasearse como auténticos caracoles con sus casitas a cuestas tan entrañablemente entre ellos.