Ser ramblero es un honor. Se es ramblero en el pueblo o en la diáspora, siendo vecino del pueblo, habiendo nacido en el pueblo o descendiendo de rambleros. Rambleros hay, incluso, en sitios tan remotos como Montevideo o San Antonio de Texas, que varias generaciones después, siguen siendo rambleros. Es ramblero (esto lo aprendí de Benicio Alonso) incluso quien matrimonia con un ramblero o una ramblera. Benicio, lagunero, ejerce de ramblero cada vez que puede. Ser ramblero es una seña de identidad, lo que comunicamos sobre todo para conocimiento de los que pretenden hacerse dadores de pasaportes y que, ellos sí, desmerecen lo que otros, como los que vamos a nombrar, tanto dignifican.
Por eso, cuando nos encontramos con un ramblero nos identificamos, y cuando un ramblero nos hace sentir orgullosos nuestra alegría no tiene límite.
El viernes por la noche se celebró en mi instituto la entraga de orlas a los alumnos y a las alumnas de segundo de Bachillerato. Y un grupo de rambleros hizo que me sintiera profundamente orgullosa. Dos alumnas, Tamara y Virginia (La Vera y Las Aguas respectivamente) y un alumno, Antonio Félix (Los Canarios-La Portalina y Los Quevedos, de donde eran sus abuelos) acabaron con éxito el Bachillerato. Antonio Félix, además, ganándose a pulso una de las dos matrículas concedidas, con un pleno al diez (todas las asignaturas superadas con diez). Cristina (la Portalina), alumna de tercero, también dejó muy alto el pabellón, pues hizo funciones de azafata magistralmente. Pero, por encima de todo, un grupo de personas rambleras que dejan el pabellón del pueblo muy alto y que hacen gala de ser de aquí. Qué orgullo.
Bien, pues Antonio Félix hizo algo más que un pleno al diez en el Instituto. Antonio es, y recibe esta tarde, Premio a la Excelencia en la PAU. Si sigue estudios en La Laguna, además, tiene matrícula gratuita.
A diferencia de otros, es un orgullo declarar que para mí, aún siendo nieto de rambleros y no ramblero de nacimiento, Antonio Félix es ramblero a todos los efectos. Sobre todo porque una circunstancia como la de la entrega del Premio a la Excelencia de esta tarde nos hace enorgullecernos a todos. Por rambleros.
1 comentario:
Enhorabuena a los grandes estudiantes,en ellos está el futuro y un buen futuro. Me gustaría saber de quién es este joven, quién era su familia, porque así yo que soy del lugar de donde es su familia me sentiría más orgullosa aún. Y si Tamara es Tamara Jorge, también enhorabuena por ese cambio tan favorable en su vida, además está muy guapa.
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