jueves, 25 de septiembre de 2008

LA DIGNIDAD ES EL RESPETO, LA RESPONSABILIDAD, LA VALENTÍA Y LA VERDAD

Hay muchos modos de entender la dignidad humana, según la mentalidad de cada época, cada sociedad, o cada persona.
Entiendo que la dignidad humana consiste esencialmente en el profundo respeto hacia sí mismo y hacia los demás. Evidentemente, si el ser humano comienza por no respetarse a sí mismo, y se auto-desprecia, no puede pretender poseer la dignidad necesaria para desenvolverse en sociedad con naturalidad, y mantener unas relaciones humanas plenas y respetuosas con otras personas. Por otra parte, una persona que no sabe o no quiere respetar a los demás, se convierte en indigna de ser apreciada y respetada.
Una exigencia fundamental de la dignidad humana es la responsabilidad. Sin ella, no es posible tampoco tener dignidad y que se la respeten a uno los demás. El ser humano debe ser plenamente responsable de sus obras y de sus actos, puesto que, a mayor responsabilidad, más dignidad se posee. Otra cosa es que todo ser humano sea digno de respeto por el hecho de ser persona, independientemente de su grado de responsabilidad, o de la situación de indigencia material o moral, en la que se encuentre. Por desgracia, hay casi infinitas maneras de perder la dignidad, que tienen que ver con las diversas vicisitudes que la vida humana nos presenta a cada uno, y ante las cuales debemos reaccionar adecuadamente, para no perderla.
Aquí tiene lugar otra exigencia importante de la dignidad humana: la valentía. Una persona cobarde, que se deja vencer por el miedo y huye o no afronta el peligro, pierde el aprecio por sí misma y el de los que la conocen y se convierte también en indigna de ser respetada, de que se confíe en ella. El problema no consiste en no tener miedo, como a veces decimos, puesto que todos lo padecemos muchas veces, al enfrentarnos a cualquier situación que suponga peligro o dolor, sino de superarlo, haciendo el esfuerzo mental y voluntario que sea necesario.
Otra exigencia necesaria para adquirir y conservar la dignidad humana, es la inclinación a buscar, amar y respetar la verdad. En efecto, una persona mentirosa, está destinada a perder la confianza, y la estima de los que la conocen, y a inspirar la indignidad que por su comportamiento se le atribuye. Naturalmente, su grado de indignidad, dependerá de la frecuencia e importancia de sus mentiras, pero deberá de cambiar de conducta, si quiere ganarse el aprecio y la confianza de los demás, para lograr ser digna de ese aprecio, y de esa confianza en sus relaciones.
Ahora bien, con el ejercicio de las virtudes humanas en general, el ser humano crece en autoestima y en dignidad, y por el contrario, cuando para satisfacer el ego personal se prefieren los vicios a las virtudes, en la medida que esos vicios son peligrosos, importantes y reiterados, producen la indignidad y la pérdida de la autoestima hasta límites indefinidos. Pero no sólo los vicios provocan indignidad, sino también las acciones injustas e inmorales aisladas que realizamos en las relaciones con nuestros semejantes.
Así que cuando personas que deben ser ejemplo para sus conciudadanos mienten y se comportan de manera irresponsable, cobarde e irrespetuosa, se convierten en seres profundamente indignos, sobre todo de la confianza que han depositado en ellos sus conciudadanos.

5 comentarios:

Anónimo dijo...

¿Y para qué les habla de dignidad Doña Fidela si ellos de dignidad y respeto no entienden nada? Hábleles de dinero, pero de más dinero, porque ganando lo que ganan, que es muy superior a la media de los sueldos de los vecinos, pues casi que no trabajan, significa que hay que hablarles de mucho dinero para que se interesen por los temas del pueblo.
Se están aprovechando de todos nosotros!!!!

Anónimo dijo...

Al reconocer y tolerar las diferencias de cada persona, para que ésta se sienta digna y libre, se afirma la virtud y la propia dignidad del individuo, fundamentado en el respeto a cualquier otro ser.

Anónimo dijo...

UNO debe hacer lo que considera oportuno, aunque los demas traten de destruirte por ello.

Anónimo dijo...

No se metan con ellos, que son muy dignos de cobrar, los sueldos que cobran, más deberian cobrar, lo que pasa es que este es un pueblo pobre.

Anónimo dijo...

Sobre el sueldo deberían dar un ejemplito, bajárselos sería loable, pero esto no sucederá en la vida, hay que ver como tienen a los empleados y como se los han subido ellos.
Esto es repugnante.