martes, 25 de noviembre de 2008
UNA BRIZNA DE CARIÑO
Se fue la semana pasada. pero se fue un poco menos, que es como se van los que nos dejan, a los que nos quedamos, el legado de ser mejores personas por haber sido coetáneos de ellos.
No era tinerfeño, sino de "allende los mares", gaditano, (la "tacita de plata" es la ciudad que dicen que más se parece a Santa Cruz), pero era villero de corazón, por matrimonio y por nombramiento. Porque Valencia, el alcalde de La Orotava no tiene el localismo rancio e ignorante de otros nacionalistas como los que nos desgobiernan, y en junio de 2006 le nombró hijo adoptivo de La Villa.
José Luis Sánchez Parodi llegó a La Orotava para ocuparse del Juzgado de Primera Instancia e Instrucción de La Villa, de 1951 a 1961. Ocuparse de ese juzgado de La Orotava es como decir de los rambleros, pues a ese partido judicial pertenecemos. En esa fecha, 1961, fue ascendido a magistrado y sirvió el Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 2 de Gijón(Asturias), desde donde volvió a Tenerife a ocupar una plaza en la sección de lo Criminal de la Audiencia Provincial hasta 1984, en que fue nombrado presidente de la Audiencia Provincial. En la audiencia terminaría su vida profesional, añadiendo en los últimos años el haber sido miembro del Consejo Consultivo de Canarias, bajo la Presidencia y el buen hacer de Gumersindo Trujillo, de cuya familia me enorgullece ser amiga, (sobre todo de su mujer Chila, primero profesora mía y siempre amiga), triste y prematuramente fallecido.
Sánchez Parodi falleció la semana pasada. con 87 años, lo que no le impedía seguir deleitándonos cada semana desde el Diario de Avisos con su columna "Recuerdos de un juez" con una prosa primorosa, y con un arsenal de recuerdos de profesional y de hombre bueno que nos deleitaba a todos cuando lo leíamos. Ese es mi principal recuerdo de José Luis, pero sólo uno de mis agradecimientos hacia él.
Porque Sánchez Parodi fue el padre de Irene y el suegro de José Francisco, dos buenos amigos. Ambos son padres de María, que fue alumna de preescolar de mi hermana, en el colegio de La Aneja, en un grupo de grato recuerdo para ella, donde convivieron niños y niñas que ahora son excelentes profesionales en distintos ámbitos. Pero, además, José Francisco es mi compañero de claustro y mi predecesor en la dirección en el San Hermenegildo, "El Militar". Caballero y amigo, José Francisco salió, liderando el Claustro, en mi defensa cuando los personajillos que desgobiernan nuestro municipio pusieron precio a mi cabeza profesional, a sabiendas que jamás, por mi talante, habría hecho aquello de lo que me acusaban.
José Luis Sánchez Parodi era un hombre cultísimo. Con sus propias palabras: "Y llego a los confines últimos de mi vida, no diré que como Antonio Machado, "desnudo como el mar". Ni soy dueño de un piso, ni tengo un apartamento en las zonas veraniegas de la Isla, ni emprendo viajes a Nueva York, Buenos Aires, siquiera a París, la ciudad que más me gusta de lo poco viajero que he sido. Pero tengo tres o cuatro mil libros, que aquí han de quedar", dijo cuáles fueron sus prioridades en la vida: los libros, siempre los libros. Machado y Lorca, Lorca y Machado, sus preferidos. Del primero me quedo con el deseo, mencionado por la lectora de la misa de su duelo, y puesto en boca de José Luis, de querer dejar, en su paso por la vida, en quienes le conocimos y le admiramos, "una brizna de cariño". Bello deseo de quien, también en palabras del poeta, al andar hizo camino.
Descanse en paz.
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3 comentarios:
Mi querida Fidela.
Qué deleite al leer estas palabras tuyas, tan llenas de cariño y de admiración a D. José Luis.Si prosa escribió él con tanta sabiduría, prosa y poética has hecho tú también con este bello,entrañable y cariño escrito. Gracias por ofrecérnoslo. Gracias por recordárnoslo. Gracias por participárnoslo. Un afectuoso saludo.
Hombre culto hombre de paz, también hay que encontrarlos fuera del pueblo. Descanse en paz.
Persona ejemplar, se fue junto con Adrian Aleman, maestro del periodismo descansen en paz.
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