SAN JUAN DE LA RAMBLA ES EL NORTE. NO LO OLVIDEMOS. CAPITULO 5. LA SEGURIDAD

SAN JUAN DE LA RAMBLA ES EL NORTE. NO LO OLVIDEMOS.
CAPITULO 5. LA SEGURIDAD

Tal vez sea deformación profesional, pero una de las cosas que más me preocupan es la seguridad del municipio. En 2011, recién llegados al ayuntamiento, tuvimos especial interés en mejorar la seguridad del municipio. Comenzamos por las escorrentías. Las pronunciadas pendientes y el paulatino abandono de cunetas y tomaderos, en muchos casos obstruídos, hizo que las aguas pluviales discurrieran a su libre albedrío por los caminos y carreteras, provocando auténticos desastres, como cuando, en el invierno de 2007-2008 un pequeño aludo de agua y materiales de arrastre rompió la plaza de la Vera Baja. Muchos vecinos tenían que correr hacia sus casas cuando sentían llover, ponerse las botas de agua y comenzar a achicar. Ese año instalamos varias rejas, a expensas del ayuntamiento y con ayuda del Cabildo,que costeó las que se instalaron en vías insulares. Los de siempre  se rieron de nosotros, porque ese invierno fue especialmente seco. Pero al siguiente, los vecinos me mandaban, aliviados, fotos y videos con el agua discurriendo hacia las rejas, que la tragaban con avidez. En 2015, cuando llegamos, seguimos insistiendo en obras de taludes y de tomaderos, pero, sobre todo, pedimos al Cabildo, a través de la Dirección Insular de Seguridad del área de Medio Ambiente, que priorizara el Plan de Emergencias de SJR. Afortunadamente nos hicieron caso, y ya podemos decir que el Plan está elaborado de forma comunitaria por personal municipal y técnicos, colectivos vecinales, colegios, sacerdotes, Centros de Salud, policía, Protección Civil, agricultores y personas que conocen profundamente el terreno, incluso las ocurrencias de desastres históricos y recientes. Con esos datos, la universidad elaboró un excelente Plan que acabamos de presentar, y que ahora toca difundir e implementar. Pero ya los cimientos están puestos. El análisis del Plan es una excelente descripción geográfica, geológica y humana del municipio. Fue una pena que, pese a ser invitados, ninguno de los grupos políticos acudió a la presentación. gobernar un municipio, o aspirar a hacerlo, exige un conocimiento profundo del espacio y de la población. Ojalá cuando yo accedí a la oposición, allá por el año 2007, hubiera existido este magnífico diagnóstico y hubiera existido, también el Plan de emergencia Municipal. Algunos de los accidentes ocurridos en los últimos años se hubiera minimizado. Contenta, pues, de haber logrado que el municipio tenga ese Plan que va a mejorar mucho la seguridad de todos y todas. Gracias a la Universidad, al Cabildo, a nuestro personal y técnicos, a los colectivos, a colegios, sacerdotes, Centros de Salud, policía, Protección Civil, agricultores y personas que conocen profundamente el terreno por sus aportaciones y por su gran disponibilidad.